En la entrevista del 23 de febrero en el programa de Jorge
Lanata en Radio Mitre, el presidente del INTI, Javier Ibáñez, aseguró que
Tecnalia –la consultora europea contratada para reestructurar el INTI- es “el
equivalente español al Instituto”. Una vez más, Ibáñez hace gala de su
ignorancia, sin saber que el homólogo español es el Centro Español de
Metrología (CEM) desde la cuestión metrológica, y desde la perspectiva pública
de innovación tecnológico industrial, existía el INASMET, pero que desapareció
como tal… cuando fue absorbido en 2010 por lo que ahora se conoce como
Tecnalia. Pero no nos adelantemos. Ya que Ibáñez pareciera no saber qué es
Tecnalia, en esta oportunidad, vamos a contarle a él y al resto de la sociedad de
qué se trata Tecnalia.
En el año 1955 se funda Labein Tecnalia, que era el mayor
centro tecnológico privado del Estado español, cuya misión era “ser aliado
natural de las empresas para el desarrollo de su capacidad innovadora, a través
de la tecnología como herramienta de competitividad”. Adelantamos más de 50
años hasta llegar al 2010, donde Labein Tecnalia absorbió las fundaciones
Robotiker, Fatronik, Cidemco, European Software Institute, Euve, Leia y el
citado INASMET. Tras un cambio de nombre –o lavado de cara- se convierte en la
Fundación Tecnalia Research and Innovation. En este nuevo patronato se integran
44 miembros, de los cuales 33 son capitales privados, 6 del gobierno vasco, 3
de las diputaciones, uno de la administración del Estado y uno de la
Universidad del País Vasco.
Esta fusión no es más que una concentración brutal del
conocimiento y los desarrollos tecnológicos, que como la composición
eminentemente privada puede mostrar, no hace más que buscar ganancias para ese
sector. Pero sigamos. Tecnalia cuenta con 1437 empleados e ingresos por 121
millones de euros… ahora.
¿Por qué decimos ahora? Porque a Tecnalia le tomó siete años
dejar de generar pérdidas. El medio especializado español Gananzia releva que
recién en 2017 este conglomerado “mejoró sus resultados”, donde inclusive se
llegó a gastar 850 mil euros en 2014 y casi un millón de euros en 2015 en
concepto de despidos. Es decir, ajustar todo lo posible, reduciendo la planta
laboral. Cuando Ibáñez dice que aumentó el presupuesto del INTI para 2018,
salta a la vista que estaba imitando esta táctica, adelantándose a las
indemnizaciones abonadas a los 258 despedidos sin causa del Instituto.
Aún hay más. En INTI Informa 3, les contamos que las firmas
que controlan Tecnalia son Petronor –es decir, la tristemente célebre Repsol-,
Ingeteam, y Kutxabank. Ingeteam dista de ser un ejemplo de eficiencia. De 2008
a esta parte, Ingeteam tuvo que salir a vender muchísimos activos por la pésima
gestión de su dirección. Los compañeros trabajadores en lucha de Ingeteam han
dicho en comunicados que tras la salida de los socios fundadores, se sucedieron
uno tras otro los equipos directivos sin que ninguno encuentre el rumbo, y como
consecuencia, salieron a vender las empresas de la firma a capitales chinos.
Kutxabank, por su parte, en 2017 redujo en un 70% su
actividad productiva ligada a la construcción. No sólo por la crisis económica
que atravesó a España en esta década, sino por la intención del equipo liderado
por su presidente, Gregorio Villalabeitia, de volcarse de lleno al mercado
crediticio financiero. Es decir: dejar de producir para meterse con fuerza en
la especulación y la timba.
El vínculo entre la gestión de Ibáñez y Tecnalia se afianzó en
2016, en un evento de la ELAN Network en Argentina, donde estuvieron presentes Sergio
Brandinelli, director de desarrollo de negocios de Tecnalia Ventures, y el
presidente del INTI, entre otros. Ese espacio tuvo como objetivo “destacar la
iniciativa de ELAN como apoyo a la colaboración tecnológica y de negocios en
Latinoamérica”. Ni desarrollo, ni crecimiento, ni políticas públicas: negocios.
El año siguiente se realizó otro evento similar, donde el mismo título no deja
nada a la imaginación: “Nuevos negocios tecnológicos entre Europa y Argentina
para abordar retos en industria 4.0 y energías renovables”. Como si fuera poco,
entre los objetivos de dicha conferencia estaban “presentar la oferta de las
empresas europeas así como su respuesta a los retos de país planteados y las
necesidades de los socios locales para llevar a cabo nuevos negocios”. Es decir:
las empresas vienen y traen su paquete cerrado, y queda en el Estado ver cómo
amoldarse para aceptarlo y que estos capitales extranjeros sean quienes hacen
negocios a costa de todos nosotros.
Concentración económica, especulación, ajuste y
privatización. Esto es lo que esconde Tecnalia en su master plan y esto es en
lo que quiere convertir Javier Ibáñez al INTI. Excepto Tecnalia, traido por la
nefasta gestión de Javier Ibáñez y sus 93 asesores, en INTI no sobra nadie.
Formato audio: https://soundcloud.com/intienlucha/inti-en-lucha-informa-5-tecnalia-el-imperio-contraataca
Comentarios
Publicar un comentario